martes, 22 de marzo de 2016

Mi amiga la rentabilidad

En esta sociedad donde todo está difuso hay ciertas cosas que no lo son tanto para la gente. Como el hecho de que nuestro motor se alimenta con lo rentable, la rentabilidad y sus tenebrosos caminos. 
Que ciego el amor por esta criatura, por esta criatura que a pesar de lo que nos dice, no abarca todo el progreso, procurad no dejaros arrastrar por su palabrerío y su atractiva sonrisa, aunque la mía no sea un paraíso la verdad.
Yo os digo que la verdad es que aunque suene enrevesado, lo más rentable es no guiarnos sólo por lo rentable, sólo nos hará estar confusos y desperdiciar mucha grandeza humana. Esa criatura caprichosa a veces se convierte en perro del hortelano y nos aparta de nuestros sueños y de nuestra humanidad, porque pese a quien le pese, incluso a los que me tachan de utópico, la historia  historia me respalda cuando digo que la vida no sólo se apoya en la rentabilidad, que cierra algunos caminos, sino también en el amor por la necesidad y no un defecto de lo no rentable.

2 comentarios:

  1. muy interesante... aunque por otra parte me parece que lo bueno nos reconforta y satisface... mejor todavía

    ResponderEliminar
  2. Estoy de acuerdo contigo en que la vida no es sólo rentabilidad. Sin amor toda vida se ahoga.

    ResponderEliminar